Reflexiones, políticamente incorrectas, sobre la vida, el arte, la política, etc.

MI MESA DE JUEGOS

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STOP DESAHUCIOS fragmento

STOP DESAHUCIOS fragmento
2015 Pintura-collage 46x200x13

lunes, 10 de noviembre de 2014

2014-11-05 MIEDO AL CAMBIO

2014-11-05 MIEDO AL CAMBIO 

Nueva carta a mi vecina, por su respuesta a mi escrito sobre DERECHAS E IZQUIERDAS.
Querida vecina, me dices en tu carta que “Ahora aparecen nuevos partidos que pretenden dar un vuelco a todo un sistema complejo, y que para cambiarlo hay que modificar la Constitución”. Un follón en definitiva.
Pero veamos; si los principios que proclaman y proponen los movimientos éticos, incluido Podemos, son: RESPETO A LOS DERECHOS HUMANOS, TRANSPARENCIA, STOP A LOS DESAHUCIOS, LEY ANTI-CORRUPCIÓN, LISTAS ABIERTAS, SEPARACIÓN DE PODERES, RENDICIÓN DE CUENTAS, ETC. Las personas que están en contra de Podemos y de los movimientos éticos, están a favor de la corrupción, la opacidad, el enchufismo, la justicia politizada, el saqueo, las puertas giratorias, la privatización, las tarjetas black, etc. están a favor de los partidos de la casta.
Te digo, querida vecina, que el problema no es cambiar el modelo de gobierno. Lo que necesitamos es una regeneración política y de los políticos. Quitar los partidos que han permitido y practicado la corrupción, tenemos que desterrar la “Escopeta nacional” y toda la casta que nos está sangrando. Y para regenerar la granja ¿pondremos al lobo y al zorro como capataces?
Por otra parte, creo, que la mayoría de votantes, mejor dicho, los que ahora aun tienen intención de voto por los partidos de la casta, siguen fieles a esos partidos, es porque los conocen, les ofrecen continuidad, mantienen el orden establecido, aunque estén llenos de  corruptos y sus leyes sean injustas para la mayoría social. (El apartheid o la esclavitud también tenían un orden establecido, y no por eso se puede decir que ese orden era justo). El voto a la casta es el voto del inmovilismo y del desprecio hacia la mayoría social, mientras ellos salven su parcela de intereses, no quieren cambios. TIENEN MIEDO AL CAMBIO. Prefieren la injusticia, los desahucios, las tarjetas black, la opacidad, y tantas otras fechorías. Antes que abrir su mente a la regeneración y los nuevos principios éticos. Que tampoco son tan nuevos y sabemos el resultado que están dando en países como Dinamarca, Suecia, Noruega, Islandia, etc.
Y mira, vecina, te pongo un ejemplo más ameno. Imagínate que te marchas a vivir a otro lugar durante cuatro meses y en tu casa se queda una persona de tu confianza. Tú la dejas encargada de mantener la casa, de vigilar, de reparar si hay algún pequeño deterioro. Etc. Y una vez te has marchado, esa persona invita a varios amigos a una fiesta en tu casa, los amigos se sienten bien y se quedan varios días, como tienes una buena despensa, van tirando de ella. Total que al final se quedan todos a vivir en tu casa. (Como los pretendientes en la casa de Penélope mientras Ulises estaba fuera). Además te roban y malvenden lo que pudieras tener de algún valor. Y tú, que vuelves antes de lo previsto, te encuentras que tu casa está "hecha unos zorros". A ver qué haces con los ocupas y cómo recompones la casa. Como no tienes la "barita mágica", no puedes hacerlo de golpe. Tendrás que hacerlo poco a poco y con cautela, por pasos.
Primero: expulsar a los ocupas (véase Casta) está claro.
Segundo: coger una gran bolsa y empezar a llenarla de basura e inmundicias y tirarla. (Véase corruptos, chupópteros, cargos de confianza, etc. etc.).
Tercero: hacer balance de los deterioros y de la situación, ver lo que se puede salvar y averiguar las cosas que faltan y las que hay que hacer de nuevo.
Y así, poco a poco, irás recomponiendo tu casa, hasta que puedas darle una capa de nueva pintura, poner floreros, colgar cuadros e invitar a tus amigos a tomar un té o un café.
En el caso de un país, hay que pensar que cuando cambia el gobierno, no cambian los técnicos y funcionarios del estado; los médicos, los maestros, los policías, los jueces, siguen haciendo sus tareas. Son ellos los que realmente hacen el trabajo. El político sólo tiene que establecer prioridades, tomar decisiones y mandar hacerlas. Claro, y establecer las condiciones legales, de transparencia y de funcionamiento para que eso no vuelva a suceder. Incluso, estableciendo las normas para que si él, el político, el administrador nombrado de entre y por los ciudadanos, no hace bien su trabajo o se corrompe, que los ciudadanos de este país, podamos destituirlo, sin esperar a que pasen cuatro años.
PABLO RODRÍGUEZ GUY.

http://rodriguezguy-reflexiones.blogspot.com.es/

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